/ marzo 15, 2021/ Higiene y desinfección

Tras la expansión a nivel mundial, de los múltiples utensilios y maquinaria de desinfección que utiliza la luz ultravioleta (UV-C) el ministerio de Sanidad publicó finalmente una clarificación en la que avala esta técnica de desinfección, también para el Covid-19, aún cuando el marco regulador en España y en Europa no está plenamente desarrollado.

Finalmente se desarrolló, a raíz de la pandemia, una norma UNE que establece las normas de seguridad que deben cumplir todos los fabricantes

Es particularmente importante señalar que la aplicación de luz ultravioleta puede producir, aunque no con la misma rapidez ni gravedad que el ozono, importantes daños para la salud de las personas y animales de compañía. Y, por lo tanto, su utilización deber ser preparada con cautela y por profesionales especialistas.

La desinfección de superficies mediante la luz ultravioleta, específicamente la luz UV-C, es utilizada mediante aparatos móviles, como aparatos o instalaciones fijas. E incluso mediante robots con diversos grados de autonomía y prestaciones fabricados por reconocidas multinacionales. En todos estos casos deben ser utilizados por técnicos de los centros sanitarios o bien por operarios cualificados y formados de empresas de desinfección.

Debería actuarse tanto por los vendedores como por los compradores en coherencia al hecho que la UV-C no es magia ni es una solución “DIY” de bricomanía. Requiere y conlleva una gran dosis de responsabilidad y honestidad para asegurar tanto la seguridad como la efectividad.

Podemos constatar que no todos los sistemas vendidos son seguros y debe verificarse el marcaje y el cumplimiento normativo europeo y de la UNE. Tanto de los componentes como del conjunto del sistema.

Por otra parte, muchas aplicaciones no son efectivas, puesto que es necesario conocer la distancia, la técnica de aplicación  y la duración de la radiación para poder afirmar que un entorno está desinfectado. El simplismo puede vender, pero no es una solución.

Finalmente, y fundamentalmente, es también necesario conocer y entender cual va a ser la operativa de cada espacio para planificar tanto la efectividad como la real seguridad.

Mullor ha contrastado y verificado diversos sistemas y algunos los hemos implantado de manera segura incluso en nuestras propias instalaciones para desinfección de las salas de formación y de espacios de alta intensidad de uso. Como refuerzo y complemento de la limpieza y desinfección tradicional de espacios con productos homologados.

Es también necesario señalar que a pesar de las ventajas y el potencial de la radiación UV-C es muy útil para hacer frente, en general, a la contaminación biológica, el coste y la operativa de estos sistemas dificulta su difusión generalizada en muchos espacios de trabajo y delimita su aplicación a entornos críticos o bien de alta ocupación y bajo circunstancias adecuadas.

Compartir esta entrada